Los sentimientos de maldad que mueven a los jóvenes pandilleros suelen estar confrontados con la posibilidad de no hacer daño a nadie; sin embargo, en la construcción de una identidad que ellos mismos califican como “mala” influyeron factores como la historia familiar y las condiciones sociales en las que crecieron.
Escucha el programa:
“Lo bueno y lo malo siempre están ahí, el amor y el odio siempre están peleando. Cuando hago algún trabajo tengo que dejar la parte buena en casa, como diciéndole: te tienes que quedar aquí porque tengo que hacer cosas malas allá fuera”.
Este es el testimonio de uno de los jóvenes que el Doctor en Ciencias Sociales Salvador Cruz Sierra entrevistó para su investigación titulada “La dualidad bondad/maldad en jóvenes pandilleros en Ciudad Juárez”. El objetivo de su trabajo fue conocer la manera en que conviven estos sentimientos en las identidades masculinas de los jóvenes pandilleros y, escuchar sus narrativas, permitió al Doctor Cruz conocer el rechazo que pueden sentir hacia su propia persona.
La trayectoria de vida que se ha experimentado desde la infancia, las carencias y tipo de sociedad en la que crece un ser humano, influyen en su sensación de pertenencia a sectores marginados y estigmatizados, incluso, influyen en la convicción de ser malo.
La relación con el padre es un tema que la feminista, socióloga y psicoanalista estadounidense Nancy Chodorow menciona como decisivo para que el joven desarrolle emociones buenas o malas. Ella afirma que “las historias de violencia vividas desde la infancia, en las que resaltan los vínculos conflictivos principalmente con la figura paterna, fomentarán un mayor sentimiento de maldad”. el Doctor Salvador Cruz coincide con la opinión de la psicoanalista norteamericana y agrega: “esta tendencia hacia la violencia también se encuentra en quienes tuvieron un papá emocionalmente ausente”.
“La bondad y la maldad representan la condición ambivalente que es inherente a la condición humana”. Los jóvenes pandilleros entrevistados por el Doctor Cruz Sierra mostraron que esta dualidad se genera en ellos por lo que viven en su entorno social, pero también por las ideas y valores que han construido de manera personal.
Los sentimientos de maldad que mueven a los jóvenes pandilleros suelen estar confrontados con la posibilidad de no hacer daño a nadie; sin embargo, en la construcción de una identidad que ellos mismos califican como “mala” influyeron factores como la historia familiar y las condiciones sociales en las que crecieron. Por tal motivo, en opinión del doctor Salvador Cruz, es necesario conocer y analizar la dualidad de sentimientos que viven los jóvenes pandilleros para comprender mejor la criminalidad juvenil y actuar en consecuencia.
Escucha las ponencias completas de la mesa no.11:
“Sentimientos y religiosidad (popular) en jóvenes Maras”
Dr. Alfredo Nateras.
“La dualidad bondad/maldad en jóvenes pandilleros en Ciudad Juárez”
Dr. Salvador Cruz Sierra
“Masculinidades y subjetividades en Iztapalapa”
Mtro. Jacobo Flores
Sesión de preguntas y respuestas: